Introducción
En el mundo natural, existen innumerables especies de animales con características diversas que sorprenden al ser humano. Dos de los términos con los que usualmente se confunden son «bichos» e «insectos». A menudo, las personas usan estos términos indistintamente, pero en la realidad, se refieren a dos conceptos completamente diferentes. En este artículo, nos enfocaremos en explicar las diferencias entre bichos e insectos de una forma clara y precisa.
Bichos vs Insectos
En primer lugar, es importante aclarar que el término «bichos» en sí no tiene una definición científica clara. Comúnmente, este término se utiliza de forma coloquial para referirse a cualquier tipo de animal pequeño, que no necesariamente es un insecto. Por el contrario, todos los insectos pertenecen a la clase Insecta, que incluye más de un millón de especies de animales.
Uno de los aspectos más notables que distingue a los insectos de otros animales es su anatomía. Los insectos tienen cuerpo segmentado, patas articuladas y alas, lo que les permite moverse con mayor facilidad. Además, su cuerpo está compuesto por tres partes: la cabeza, el tórax y el abdomen.
Otra diferencia fundamental entre bichos e insectos es que los insectos realizan funciones importantes en el ecosistema. Por ejemplo, muchos de ellos realizan la polinización de plantas y flores, contribuyendo directamente a la producción de alimentos. Además, algunos insectos son importantes agentes de control biológico, lo que significa que se utilizan para controlar las plagas en los cultivos.
Además, los insectos pueden ser aeróbicos o anaeróbicos, lo que significa que pueden vivir en ambientes con o sin oxígeno. En cambio, muchos bichos son animales terrestres, que requieren respirar aire para sobrevivir.
Tipos de bichos
Si bien el término «bicho» no tiene un significado científico específico, a continuación, presentamos algunos ejemplos de animales pequeños que pueden ser considerados bichos:
- Arácnidos: Las arañas, los ácaros y los escorpiones, son algunos ejemplos de arácnidos que pueden ser considerados bichos, aunque no son insectos. A diferencia de los insectos, los arácnidos tienen cuerpo en dos partes y ocho patas, lo que los hace similar al aspecto de un insecto.
- Gusanos: Los gusanos también se pueden considerar bichos, aunque la mayoría de los gusanos no son insectos. Los gusanos tienen un cuerpo alargado y a menudo carecen de patas.
- Cienpiés: Los cien pies a menudo se confunden con los insectos, pero son animales más similares a los artrópodos que tienen muchas patas.
Tipos de Insectos
Como mencionamos anteriormente, los insectos son un grupo de animales mucho más diverso. A continuación, presentamos algunos ejemplos de insectos:
- Mosquitos: Los mosquitos son insectos voladores que chupan sangre y suelen molestar a los seres humanos. Los mosquitos hembra necesitan nuestra sangre para producir huevos y, como todo insecto que presenta una picadura, tienen un papel en el equilibrio ecológico.
- Mariquitas: Las mariquitas son un ejemplo de insectos que ayudan en la agricultura. Las larvas de las mariquitas comen pulgones, los cuales son plagas comunes en las plantas de jardín y en las cosechas.
- Abejas: Las abejas son importantes para polinizar las plantas y la producción de miel, una de las mejores fuentes naturales de azúcar.
- Mariposas: Las mariposas son conocidas por su hermoso aspecto y por su importante papel en la polinización de las plantas.
Conclusion
En conclusión, aunque comúnmente se usen indistintamente, bichos e insectos son dos términos que no se refieren a la misma cosa. Los insectos son animales que pertenecen a la clase Insecta, que tienen características muy específicas como su anatomía y su importancia en el ecosistema. Por otro lado, el término «bichos» es un término más general que se utiliza para referirse a cualquier tipo de animal pequeño, que no necesariamente es un insecto. En resumen, conocer la diferencia entre bichos e insectos es importante para entender cómo funciona el mundo natural que nos rodea.